DE TAL MANERA AMÓ DIOS AL MUNDO, QUE DIO A SU ÚNICO HIJO, para que TODO AQUEL QUE EN EL CREE, NO SE PIERDA, MAS TENGA VIDA ETERNA. Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por El.
EL QUE EN EL CREE, NO ES CONDENADO; pero el que no cree, ya ha sido condenado...
Y esta es la condenación: que LA LUZ VINO AL MUNDO, Y LOS HOMBRES AMARON MÁS LAS TINIEBLAS QUE LA LUZ, porque sus obras eran malas.
Todo aquel que hace lo malo, aborrece la luz y no viene a ella para que sus obras no sean reprendidas. Mas el que practica la verdad viene a la luz, para que sea manifiesto que sus obras son hechas en Dios. Juan 3:16-21

8 de noviembre de 2010

Enseñanzas de Jesús

"Si ustedes quieren ser mis discípulos, tienen que olvidarse de hacer su propia voluntad.
Tienen que estar dispuestos a llevar su cruz y seguirme. Porque si sólo les preocupa salvar la vida, la van a perder. Pero si deciden dar su vida por Mí y por anunciar las Buenas Noticias, entonces se salvarán.
De nada sirve que una persona gane todo lo que quiera en el mundo, si al fin de cuentas pierde su vida."
(Marcos 8:34-37)

El Sermón del Monte:

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