• Salmos, capítulos 27 al 29
El Señor es nuestra luz y nuestra salvación. No temamos, El es la fortaleza de nuestra vida. Aunque el adversario acampe contra nosotros, aunque las fuerzas del mal se amontonen a nuestro alrededor y quieran destruirnos, nuestro corazón no temerá porque confiamos en el nombre de nuestro Señor.
No se aparte nuestro corazón del Señor, permanezcamos en Sus caminos todos los días de nuestra vida. Busquémosle en oración; contemplemos la hermosura de nuestro Dios y Su majestad. En el día del mal, El nos esconderá bajo Sus alas, nos protegerá bajo Su sombra, y nos pondrá a salvo sobre una roca firme. El Señor no es un Padre que abandona a Sus hijos... El nunca nos dejará!
No desmayemos; creamos que veremos Su bondad sobre nuestras vidas. Aguardemos al Señor. Esfuércense nuestras rodillas durante la espera, y recobre el aliento nuestro corazón.
Cristianos, mantengamos firme nuestra confianza puesta en Su nombre y perseveremos con fidelidad en el camino angosto, pues nos conduce a la vida eterna. ¡No nos desanimemos, esperemos con paciencia Su salvación!
◘
DE TAL MANERA AMÓ DIOS AL MUNDO, QUE DIO A SU ÚNICO HIJO, para que TODO AQUEL QUE EN EL CREE, NO SE PIERDA, MAS TENGA VIDA ETERNA. Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por El.
EL QUE EN EL CREE, NO ES CONDENADO; pero el que no cree, ya ha sido condenado...
Y esta es la condenación: que LA LUZ VINO AL MUNDO, Y LOS HOMBRES AMARON MÁS LAS TINIEBLAS QUE LA LUZ, porque sus obras eran malas. Todo aquel que hace lo malo, aborrece la luz y no viene a ella para que sus obras no sean reprendidas. Mas el que practica la verdad viene a la luz, para que sea manifiesto que sus obras son hechas en Dios. Juan 3:16-21
EL QUE EN EL CREE, NO ES CONDENADO; pero el que no cree, ya ha sido condenado...
Y esta es la condenación: que LA LUZ VINO AL MUNDO, Y LOS HOMBRES AMARON MÁS LAS TINIEBLAS QUE LA LUZ, porque sus obras eran malas. Todo aquel que hace lo malo, aborrece la luz y no viene a ella para que sus obras no sean reprendidas. Mas el que practica la verdad viene a la luz, para que sea manifiesto que sus obras son hechas en Dios. Juan 3:16-21
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario