DE TAL MANERA AMÓ DIOS AL MUNDO, QUE DIO A SU ÚNICO HIJO, para que TODO AQUEL QUE EN EL CREE, NO SE PIERDA, MAS TENGA VIDA ETERNA. Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por El.
EL QUE EN EL CREE, NO ES CONDENADO; pero el que no cree, ya ha sido condenado...
Y esta es la condenación: que LA LUZ VINO AL MUNDO, Y LOS HOMBRES AMARON MÁS LAS TINIEBLAS QUE LA LUZ, porque sus obras eran malas.
Todo aquel que hace lo malo, aborrece la luz y no viene a ella para que sus obras no sean reprendidas. Mas el que practica la verdad viene a la luz, para que sea manifiesto que sus obras son hechas en Dios. Juan 3:16-21

7 de agosto de 2010

Nuestra lectura de hoy, sábado 7 de agosto

Proverbios, capítulos 27 al 29

"El que encubre sus pecados no prosperará; mas el que los confiesa y se aparta alcanzará misericordia.
Bienaventurado el hombre que siempre teme a Dios." (Proverbios 28:13-14)

Si confesamos nuestros pecados, El es fiel y justo para perdonarnos y limpiarnos de toda maldad. (1 Juan 1:9)

Dichosos los de limpio corazón, porque ellos verán a Dios! (Mateo 5:8)

No hay comentarios:

Publicar un comentario