DE TAL MANERA AMÓ DIOS AL MUNDO, QUE DIO A SU ÚNICO HIJO, para que TODO AQUEL QUE EN EL CREE, NO SE PIERDA, MAS TENGA VIDA ETERNA. Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por El.
EL QUE EN EL CREE, NO ES CONDENADO; pero el que no cree, ya ha sido condenado...
Y esta es la condenación: que LA LUZ VINO AL MUNDO, Y LOS HOMBRES AMARON MÁS LAS TINIEBLAS QUE LA LUZ, porque sus obras eran malas.
Todo aquel que hace lo malo, aborrece la luz y no viene a ella para que sus obras no sean reprendidas. Mas el que practica la verdad viene a la luz, para que sea manifiesto que sus obras son hechas en Dios. Juan 3:16-21

29 de julio de 2010

Nuestra lectura de hoy, jueves 29 de julio

Salmos, capítulo 150
Proverbios, capítulos 1 y 2

"El principio de la sabiduría es el temor de Jehová." (Proverbios 1:7)

La verdadera sabiduría la obtienen aquellos que honran y obedecen a Dios. Esta sabiduría que es de lo alto, es pura, pacífica, amable, benigna, llena de misericordia y de buenos frutos, sin incertidumbre ni hipocresía. (Santiago 3:17)

Que nuestro corazón y nuestra mente alcancen esta clase de sabiduría, para que vivamos de manera agradable a nuestro Señor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario